El reinicio de Spider-Man me ha vuelto a sorprender. No tenía ganas de ver la película y, una vez arrastrado a verla, me gustó. Y con el juego oficial lo mismo: recibí las noticias sin ilusión y he acabado encantado pese a haberlo jugado por obligación (a veces es la única forma de quitarse la tontería). El desarrollador Beenox demuestra con su tercer juego sobre el superhéroe que lo tienen dominado y que son capaces de ofrecer, quizás, la mejor entrega hasta la fecha.
La trama, aunque no derrocha originalidad (sobre todo teniendo en cuenta otros juegos del arácnido), está bien narrada y mantiene el interés hasta el final. Arranca a raíz del final de la película como un epílogo que acaba desembocando en una nueva aventura, una sabia decisión porque no compite con lo visto en cines y expande dicho universo de cara a la secuela (ojo a los nuevos villanos 😉 ).
Con el doctor Connors entre rejas, Oscorp está inmersa en un lavado de cara para mejorar su imagen pública y afirma que ya han cesado los experimentos interespecies. Sin embargo, el experto en nano-tecnología Alistair Smythe ha seguido adelante con ellos en secreto y la cosa se le ha ido de las manos: nuevos especímenes y el virus mutante que los ha creado amenazan ahora Manhattan. Spider-Man buscará una solución aliándose con el doctor Connors mientras Smythe trata de arreglarlo mediante sus robots. Pero, ¿quién tiene la clave para salvar la ciudad?
El juego se divide en misiones, tanto principales como secundarias, que podremos cumplir a nuestro antojo porque se desarrolla en un mundo abierto (limitado no obstante a la isla de Manhattan, que da para kilómetros de piruetas). Hay variedad en las tareas, que van desde las inevitables patrullas callejeras hasta reportajes fotográficos, búsqueda de objetos o rescate de civiles. No hay opción para aburrise.
Todo es posible gracias al nuevo móvil con GPS de Peter: con él no solo podremos orientarnos y ver los puntos de interés del mapa, sino que además aglutina los menús de juego, recibe y envía llamadas y ofrece actualizaciones del estado de la ciudad. Realmente práctico y una sabia decisión de diseño, aunque no sea algo revolucionario.
Precisamente hablando de diseño, hay que aclarar que la base de este juego está tomada de otro de calidad probada: se trata de un Arkham City en versión Spider-Man. Esto no quiere decir que el juego sea necesariamente oscuro (de hecho, se suceden distintas horas de luz y climas, no como la excesivamente nocturna película), sino que ha tomado prestado su sistema de ciudad abierta, su estilo de pelea y sus automatismos para encaramarse a diversos puntos del escenario.
El control no se complica. Huye de los antiguas combinaciones de botones y ofrece algo sencillo y directo: un botón para golpear (que aglutina diversos movimientos en función del contexto y las pulsaciones dadas), un botón para saltar (en terreno abierto, más o menos en función de cuánto se presione), un botón para esquivar (previo aviso del sentido arácnido), un botón para lanzar bolas de telaraña o enredar a los enemigos, y los gatillos superiores se reservan para un control más detallado de las telarañas.
Si bien todos los controles están parcialmente automatizados, algo que los más expertos podrán criticar de entrada, la fórmula resulta la más completa y satisfactoria hasta la fecha porque exprime las habilidades de Spider-Man sin follones. ¿Quieres balancearte entre redes? Mantén pulsado R2. ¿Necesitas escapar? L1 te llevará al instante lejos de la zona de acción para recuperar vida. ¿Necesitas llegar a un punto específico o atacar a alguien en concreto? Esto ya tiene más chicha.
Aquí viene la novedad de control más polémica: para evitar un puntero en pantalla a donde dirigir al personaje o a sus redes, algo que en momentos de acción puede desesperar, se ha optado por encubrirlo con un modo de visión arácnida. Este modo, que se habilita con R1 y simula la visión desde la máscara de Spidey (distorsión de lente incluida), ralentiza el tiempo y destaca lugares y enemigos con los que interactuar dentro de un rango limitado de acción. Puede parecer una ayuda excesiva pero en realidad es más un alivio (a la acción, a las 3D…) que otra cosa porque al final todo te lo curras tú y cuentas con tan poca resistencia al daño que caben pocas bromas (¡huye de los enemigos con metralleta!).
Por todo lo dicho, el control está tan bien adaptado a un mando convencional que, una vez más, el empleo de sensores de movimiento (Move, en el caso de PS3) es una opción que no merece la pena contemplar porque no mejora el apuntado.
Como no podía ser de otra manera, la mayoría de los esfuerzos están puestos en recrear a Spider-Man. No solo luce y suena (con esa incontinencia verbal que le caracteriza) sensacional, sino que se mueve aún mejor y cuenta con animaciones inéditas. Verlo en directo es todo un espectáculo dada su amazing agilidad, pero aún más es controlarlo dada la rapidez con que maniobra y la chulería que destila en sus ataques. En este sentido, el Batman del Arkham City en que se basa parece una lenta y brutal mole en comparación, siempre desde el cariño porque ambos son coherentes.
Por lo demás, te esperan intensas batallas contra enemigos finales (algunos para el recuerdo), homenajes a la película (red-sensor incluido), eventos de respuesta rápida y un sinfín de cosas más que hacer en una Manhattan que respira vida y en la que no puedes relajarte demasiado porque hay enemigos hasta en el mapeado.
En general, un gran juego en general y más aún para los fans. ¿Te gustó la peli? Te gustará el juego. ¿Eres más de los cómics? Es igual: pruébalo. Palabra de fan de la hoja impresa.
LO MEJOR
- Los movimientos de Spider-Man y la sensación de ser él al recorrer Manhattan.
- Poder cazar a los malhechores en silencio.
- El control resulta natural y muy accesible.
- La dificultad es la justa para ofrecer un reto y no desesperar.
- El aspecto audiovisual general es bueno y actual.
- La historia rivaliza con la de la película, construye a partir de ésta y logra emocionar.
- La ciudad parece viva entre transeúntes, vehículos, eventos aleatorios y los mensajes tipo Twitter de los ciudadanos de Nueva York.
- La duración es apropiada y relativa a cada jugador: la historia te la puedes terminar en una tarde, pero completar todos los retos de la ciudad ya es otra historia.
- Las habilidades y extras (como diseños, perfiles o comics clásicos) que se habilitan al recolectar objetos y superar retos merecen la pena.
LO PEOR
- Los modelados humanos (incluyendo personajes como Gwen, Smythe o Connors) y sus animaciones son simplemente correctos. Spidey, las criaturas y los robots se llevan la palma.
- Aunque no es especialmente grave y se suele dar en momentos de mucha acción, se aprecia una desincronización horizontal en pantalla que produce un corte.
- No cuenta con los derechos de imagen de los actores de la película ni con sus voces. Por suerte los dobladores lo hacen genial, aunque canta a la vista.
- El control automatizado al luchar o escapar juega malas pasadas en ocasiones porque no hace lo que quieres, y lo mismo pasa con la cámara. No obstante, pequeñas minucias miradas en retrospectiva con otros juegos: aquí estás menos vendido.
- Se reutilizan en exceso los niveles (fábrica, alcantarilla, laboratorio…) de modo que al final todo te suena a visto.
- La evaluación de los encuadres en las misiones fotográficas es discutible y obliga a realizar varios intentos hasta conseguirlo, aunque la foto quede horrenda. La guinda es que cuando se publica el reportaje fotográfico ni siquiera se usan tus fotos y las que aparecen tienen ese encuadre que tú buscabas y que te han negado. ¡Argh!
RUEGOS Y PREGUNTAS
- Venom, ¿para cuándo?
- Más Gata Negra (¡ups!)
- ¡DLC quiero! (¿Más juego, porfiplis con nata?)
DATOS
- Versión analizada: PS3
- Plataformas: Xbox 360, PS3, 3DS, DS, Wii, PC (10 agosto)
- Género: acción en mundo abierto, plataformas
- Desarrolla: Beenox
- Distribuye: Activision
- Jugadores: 1
- Idioma: voces en inglés, textos en castellano
- PEGI: 16
- Precio: 70,99 € en PS3 y Xbox 360, 40,99 € en 3DS, DS y Wii
- Sitio web: www.theamazingspidermangame.com