El mono macarra ahora debuta por primera vez en Nintendo 3DS con Donkey Kong Country Returns 3D a partir de este viernes 24 de mayo.
Todo comenzó en 1981. Shigeru Miyamoto, Premio Príncipe de Asturias, tuvo un primer gran encargo para una empresa hasta ahora poco relacionada con el mundo del videojuego (siendo éste su segundo juego para máquinas recreativas). ¿El resultado? Donkey Kong, un videojuego con una estética reconocible y un entorno coherente, un universo visualmente comprensible y que incluía pinceladas de una historia en la que una figura ‘maligna’, como el gorila Donkey Kong, capturaba a princesa y generaba así el primer gran ‘tópico’ del videojuego: la figura femenina en peligro y una misión definida para el héroe.
En los 80 aparecieron otros dos videojuegos en los que el Donkey Kong ya debutaba en solitario, Donkey Kong Jr. (1982), y Donkey Kong 3 (1983). Pero fue en los 90 cuando se asentó como franquicia y comenzó a pisarle los talones al bueno de Mario. Donkey Kong Country se convirtió en uno de los videojuegos más populares de la historia vendiendo más de nueve millones de copias en todo el mundo. A él le siguieron Donkey Kong Country 2: Diddy’s Kong Quest (1995) y Donkey Kong Country 3: Dixie Kong’s Double Trouble (1997), Donkey Kong 64 (1999), Donkey Kong Jungle Beat (2004) o Donkey Kong Country Returns (2010).
Y ahora, en 2013 y en 3D, llega Donkey Kong Country Returns para la 3DS de Nintendo.