Análisis de Detroit: Become Human

Detroit: Become Human

Detroit: Become Human

Es bien conocido el empeño de David Cage, director de Quantic Dream, por crear videojuegos que avanzan según las decisiones que tome el jugador. Lo vimos en Heavy Rain y luego en Beyond: Dos Almas. Con Detroit: Become Human da un paso más con su obra más redonda y profunda.

Detroit: Become Human trata un tema que no es en absoluto nuevo en ninguna disciplina como es la relación entre el hombre y la inteligencia artificial. ¿Siempre beneficiosa? ¿No tiene ningún tipo de riesgos? ¿Hacia dónde nos encaminamos? Son preguntas que él se hace y cuya repuestas deja en nuestras manos con las decisiones que tomamos.

Sin ánimo de destripar absolutamente nada solo diremos que manejamos a tres androides distintos: Kara (la misma a nivel diseño del maravilloso corto «Project Kara» que vimos en 2012), Connor y Marcus, cada uno dedicado a una labor distinta. Kara es una canguro que debe cuidar de una niña pequeña, Connor es un especialista en negociaciones en situaciones delicadas y en investigación de escenarios de crímenes, y Marcus tiene a su cuidado a un artista muy mayor de salud delicada.

Connor, Markus y Kara

Connor, Marcus y Kara

Cada uno cuenta con su propia historia que se irá desarrollando según queramos nosotros ya que las posibilidades son muchísimas. El juego está dividido en numerosos capítulos que iremos descubriendo conforme los acabemos.

En cuanto a acciones, por una parte están las normales y corrientes, las que hacen que nuestro personaje se mueva: avanzar, abrir una puerta, una ventana, coger un objeto, etc., todo a base de hacer pulsaciones de una u otra forma con los botones del mando. Luego tenemos las que definen un resultado, como decidir coger un arma del escenario o no, golpear a una persona u optar por la vía pacífica, etc.

Podemos elegir el tipo de conversación que queremos

Podemos elegir el tipo de conversación que queremos

Lo mejor de esto es que casi todo lo que hagamos tiene consecuencias en el futuro, tanto inmediato como más lejano, por lo que hay que hay que pensar muy bien qué queremos hacer ya que las consecuencias pueden ser imprevisibles.

Esto genera, literalmente, cientos de historias distintas: Detroit: Became Human tiene una cantidad de ramificaciones gigantesca y podríamos decir que no hay finales buenos o malos, todo depende del nivel de compromiso que queramos tener para con los personajes, a los que además podemos perder en cualquier momento.

Lo polémico (por las críticas que ha levantado) llega al final de cada capítulo porque David Cage nos muestra todo lo que hemos hecho. Igual que en la demo, se nos muestra una pantalla con un árbol de decisiones con todas las que hemos elegido y los caminos que hemos abierto. Los no abiertos se muestran como zonas sin texto para que no sepamos lo que hay en ellos y así se nos anima a rejugar dicho capítulo. Nosotros creemos que mostrar este árbol de decisiones es muy buena idea ya que nos hace tener una idea de todo lo inexplorado que falta y nos pica a volver a jugar para intentar cosas distintas.

Al final de cada capítulo vemos las opciones elegidas y los caminos que quedan por descubrir (no hagáis zoom para no desvelaros nada)

Al final de cada capítulo vemos las opciones elegidas y los caminos que quedan por descubrir (no hagáis zoom para no desvelaros nada)

Hablando de rejugar, podemos hacerlo en cualquier momento, pero cualquiera que haya visto la intensidad de la historia recomienda jugarlo de corrido, sin pausas, para hacerlo de una vez. Una vez terminado sí que se recomienda rejugar para ver nuevos caminos y opciones.

Si rejugamos, el juego nos avisa de que podemos bien sobreescribir la historia que vayamos a jugar o bien no sobreescribir y hacerlo solo por explorar. Nuevamente, es nuestra decisión. Lo que está claro es que en la primera partida, si la hacemos como debe ser, apenas vemos un 40 % de las opciones disponibles.

Al final de cada capítulo también se nos dan una cantidad de puntos que sirven para desbloquear contenido de los extras. Pero no os preocupéis, son puntos de juego, nunca hay que invertir dinero real en nada.

Con Connor veremos los interrogatorios más intensos

Con Connor veremos los interrogatorios más intensos

Uno de los puntos más interesantes del juego llega cuando los personajes se encuentran entre ellos, ya que en esos casos vamos manejando a uno u otro según la situación. Y ahí está el máximo interés porque no siempre los tres androides buscan lo mismo y nos encontramos con que con un personaje estamos haciendo algo que va contra el otro y evidentemente, queremos que los dos sobrevivan, pero a la vez que los dos cumplan su objetivo.

En estas decisiones entra también el factor tiempo, con un máximo de segundos para hacer algo y que nos obligan a estar pendientes y alertas.

Es recomendable también explorar los escenarios porque encontraremos una especie de coleccionables que vienen en forma de revistas que aportan contexto sobre el mundo del juego y que, si bien no son fundamentales para comprender la historia, sí que dan muchísimos detalles muy interesantes y que incluso pueden ayudarnos en algunas decisiones.

Hay revistas con información muy relevante, por fortuna los textos están en perfecto castellano

Hay revistas con información muy relevante, por fortuna los textos están en perfecto castellano

Es obligatorio hablar del aspecto técnico porque es, sencillamente, sobresaliente. El nivel de detalles es absolutamente apoteósico, basta ver a Chloe, el androide del comienzo, para darse cuenta. Los personajes principales están recreados con un mimo y un cariño enfermizo, sus expresiones lo dicen todo, especialmente los ojos. Todo ello gracias al motion capture usado para que los actores virtuales estén clavados a sus reales.

Los escenarios por su parte tienen también un enorme nivel, con un Detroit futurista en el que no se han escatimado en nada. Y todo acompañado por una resolución de 1080p en PS4 y 30 fps perfectos. Si tenéis PS4 Pro podéis verlo en 4K y HDR (si el monitor lo permite).

El nivel de detalle en rostros y ojos es sublime, lo transmiten todo

El nivel de detalle en rostros y ojos es sublime, lo transmiten todo

El doblaje también es excelente y nos mete de lleno en el juego. Tenemos a grandes actores como David Robles, Olga Velasco, Luis Bajo, Roberto Encinas (Nate) y Carlos Kaniowski.

La música es tema aparte ya que han contado con tres compositores distintos para los personajes, uno de los cuales es John Paesano, conocido entre los fans de Netflix y Daredevil porque es el compositor de su banda sonora. Las composiciones son geniales e incluso hay ciertos momentos en que tú decides cómo será la música.

Ahora bien, no es un juego perfecto:

  • Hay algunos tiempos de carga entre capítulos que se hacen largos, y eso que el juego está instalado en el disco duro.
  • Ciertos giros de guion en algunos personajes se antojan algo forzados. Ya pasaba en Heavy Rain y aquí vuelve a pasar.
  • Hay algunos QTE que no los coge bien el juego y eso hace que el camino que tomas más que por elección sea por obligación.
  • Algunos subtítulos entran tarde y por tanto duran muy poco, y se ha colado alguna falta de ortografía. De todas formas hay tantísimo texto que es normal.
  • Algunas veces las voces se quedan enmascaradas bajo la música o los efectos de sonido.
  • Algunos capítulos son muy lentos, llegan a desesperar porque exigen una cantidad absurda de acciones para avanzar apenas nada.
Uno de los rostros estrella: Lance Henriksen

Uno de los rostros estrella: Lance Henriksen

CONCLUSIÓN

Quantic Dream ha creado su juego más ambicioso y profundo, y la jugada les ha salido francamente bien. Aun con algunas decisiones que se antojan extrañas, sin duda los amantes de los juegos dramáticos están de enhorabuena porque este título se merece estar entre los favoritos. Es duro, es largo, con decisiones que te llegan a marcar y doler y otras que te arrancan la lágrima. No busquéis acción sin parar, tiroteos ni nada parecido porque no lo vais a encontrar, está hecho y pensado de otra forma, para involucrarse con los personajes a través de sus diálogos y reacciones. Sin duda recomendado para los fans de los juegos profundos.

Podéis escuchar nuestro análisis en el programa 8×12 a partir del minuto 99:

DATOS

Desarrolladora: Quantic Dream.
Distribuidora: PlayStation España (copia física, muchas gracias).
Género: drama.
Plataformas: PS4, PS4 Pro.
Plataforma analizada: PS4.
Idioma: totalmente en castellano.
PEGI: 18+ (violencia, lenguaje soez, detalles sensuales).
Precio: 64,95 para PS4, 2000 para Xbox One y 1999 para PC. En la Store por 59,99.
Web oficial: http://www.quanticdream.com/fr/