Análisis de Call of Duty: WWII

Call of Duty: WWII

Call of Duty: WWII

Cada año llega puntual a su cita. Activision pone toda la carne en el asador para que, pase lo que pase, tengamos entre las manos un nuevo Call of Duty. En Call of Duty: WWII dejamos las batallas espaciales y nos vamos a las trincheras de la segunda guerra mundial, se acabaron las armas futuristas, los jetpacks, robots asesinos y la parafernalia anterior. COD vuelve a su esencia misma y al peor conflicto bélico que la humanidad haya conocido.

La campaña para un jugador se centra en varios días de importantes combates que marcaron un antes y un después. Gigantescas ofensivas contra los nazis que se personifican en los protagonistas que manejamos. El año pasado contaron con Kit Harington para el villano, y este año el rostro famoso es Josh Duhamel, conocido sobre todo por la serie Las Vegas y por cuatro de las cinco entregas de Transformers, aunque en esta ocasión no hace de villano sino de un muy rudo sargento.

Este año el rostro de la campaña es Josh Duhamel

Este año el rostro de la campaña es Josh Duhamel

Nosotros somos el soldado Daniels y debemos cumplir las misiones que vamos recibiendo. Una pantalla de presentación nos da una idea de lo que vamos a encontrar, luego podremos elegir la dificultad y finalmente accedemos a ella. El resto es de sobra conocido: escenario en forma de «pasillo» ya que solo hay un camino (a veces con cierta amplitud, pero nunca mundo abierto) y hay que acabar con todos los enemigos, los cuales salen de cualquier lado. Contamos con dos armas, una principal, otra secundaria, aparte de granadas clásicas y de humo.

La campaña sigue siendo tan lineal como siempre

La campaña sigue siendo tan lineal como siempre

Si queremos pararnos un poco más podemos buscar unos objetos llamados recuerdos y hacer unos actos de valentía consistentes en salvar a alguien a punto de morir por ataques del enemigo.

Las armas, como es lógico, son las habituales en la época, tanto en apariencia como en comportamiento, lo que implica una lentitud considerable para recargarlas cuando se quedan sin munición, así como cartuchos de capacidad relativamente escasa.

Armas que podemos ver en Call of Duty: WWII

Armas que podemos ver en Call of Duty: WWII

Un asunto de vital importancia y que debemos tener en cuenta es que la vida ya no se restablece esperando unos segundos, esta vez tenemos que encontrar botiquines por el escenario o pedirlos a uno de nuestros compañeros. Pasa igual con la munición, la cual puede escasear perfectamente pero podemos encontrar bien en depósitos de munición por el escenario, en soldados abatidos o pedirla a otro de nuestros compañeros: nos acercamos al correspondiente, pulsamos el botón superior de la cruceta digital y nos la da.

Por fortuna no todo es disparos sin más, hay momentos puntuales en los que debemos ejecutar una serie de pulsaciones de botones en momentos críticos, estilo quicktime events. Si los hacemos bien, seguiremos adelante, Si no, moriremos y tocará repetir. También veremos ciertas secciones de infiltración y sigilo que intentan emular los Metal Gear o incluso los Uncharted, pero obviamente no llegan a ese nivel de excelencia. No son nuevas en los COD pero siempre se agradece tener algo de calma de cuando en cuando.

No todo son disparos siempre, en algunas pantallas no podemos sacar ningún arma

No todo son disparos siempre, en algunas pantallas no podemos sacar ningún arma

En general no hay grandes cambios, así que podemos afirmar que es la campaña es un Call of Duty, con todas sus virtudes y sus defectos.

MULTIJUGADOR Y ZOMBIS

Vuelven ambos, tanto online como offline, algo muy de agradecer en estos años en los que casi ningún juego sigue apostando por ofrecerlo todo sino solo una parte. En el online tenemos el llamado «Cuartel General«, una zona social en la que damos forma y evolucionamos a nuestro soldado. No solo podemos elegir misiones, ver la correspondencia con las órdenes y las recompensas y seleccionar equipamiento, también podemos interactuar con otros soldados, de ahí lo de zona social.

El

El «Cuartel General» se convierte en la zona social del juego

Este cuartel general se ambienta en una zona de guerra con sus correspondientes búnkeres en el que incluso hay una zona dedicada al cine con un proyector de Super 8 y en el que al principio podemos ver un vídeo con las distintas explicaciones de las facciones que podemos elegir. Por fortuna, una vez elegida una facción podemos elegir después más gracias a las varias ranuras que ofrece el juego en la creación de personajes, así que elegir una no es rechazar el resto para siempre.

Los suministros que pedimos con armamento llegan en forma de las tan odiadas cajas, llamadas loot, y que además incluyen cartas, con toda la polémica que ello implica.

Cajas y cartas, cómo poner en un juego dos sistemas muy criticados

Cajas y cartas, cómo poner en un juego dos sistemas muy criticados

Los mapas, como es obvio, se ambientan en escenarios propios de la IIGM como trincheras y barcos, por lo que podéis olvidaros de la verticalidad de los anteriores COD, los dobles saltos y demás avances. Se vuelve al clásico de entre los clásicos con combates a toda velocidad en casi la misma altura. Lo que no cambia es el frenetismo con el que podemos morir y la velocidad a la que reaparecemos.

En el multijugador volvemos a poder elegir nuestra clase de soldado

En el multijugador volvemos a poder elegir nuestra clase de soldado

Seguimos teniendo un muchos de modos de partida, lo que asegura que casi cada uno tendrá algo a su gusto: duelo por equipos (jugar en equipo y acabar con el contrario), dominio (tomar y mantener las posiciones marcadas para puntuar), buscar y destruir un objetivo, baja confirmada (eliminar enemigos y lograr su chapa de ID), todos contra todos, etc.; casi todos los conocemos ya, pero hay una novedad que es el modo Guerra y que es jugar en equipo en un mapa de gran extensión y tener que ir cumpliendo una serie de objetivos. Evidentemente tenemos ajuste de enemigos por nivel (matchmaking) que podemos usar o no, siempre a nuestra elección.

También hay desafíos que van surgiendo y que nos proponen superar ciertas marcas, como lograr cierto número de muertes en poco tiempo, cierto número de disparos en la cabeza, bajas con una granada, etc., hay muchas formas de practicar y subir de nivel.

No podemos dejar de hablar del dinero del juego, los puntos Call of Duty, que se utilizan para conseguir suministro raros y cajas de zombis. Se pueden comprar desde 1,99 o hasta 99,99; es polémico pero totalmente lógico si no quieres esperar. También se pueden ganar jugando y teniendo paciencia.

El dinero también vuelve, en forma de puntos

El dinero también vuelve, en forma de puntos

Por su parte el modo zombis presenta un modo en solitario (nada recomendable) o en compañía (muy recomendable), y en este segundo caso veremos a dos titanes de la actuación: Ving Rhames (Misión Imposible) y David Tennant (Dr. Who, Jessica Jones y Broadchurch). Volvemos a tener un sencillo pero divertido modo historia, esta vez llamado El último Reich, y que nos lleva a un pueblo minero en el que hay un laboratorio nazi de investigación en el que han pasado cosas extrañas porque se ha jugado con la vida y la muerte y los resultados han sido malos, muy malos, lo que permite ver criaturas horrendas y en hordas, así que hay que sobrevivir desbloqueando el mapa para avanzar.

David Tennat en el multijugador zombi de Call of Duty: WWII

David Tennat en el multijugador zombi de Call of Duty: WWII

Ving Rhames en Call of Duty: WWII

Ving Rhames en Call of Duty: WWII

APARTADO TÉCNICO

Sledgehammer Games no ha arriesgado nada de nada. Sí, sigue yendo a 60 fps sin apenas caídas pero a base de ofrecer unas texturas y animaciones simplonas que a día de hoy ya desentonan. Antes más o menos se podía entender ya que están desarrollando para la actual y la anterior generación, pero ahora el desarrollo es exclusivo de la actual y las consolas permiten mucho, muchísimo más. Se cumple con lo básico pero no destaca en casi nada, aunque hay algún momento de iluminación que agrada.

Sonoramente lo mismo: todo correcto con un doblaje aceptable aunque algunos personajes tienen una total falta de emoción y varias desincronizaciones muy grandes.

A esto hay que sumarle que la campaña es bastante floja. Se intenta dotar a los personajes de personalidad y que empaticemos y sintamos con ellos, pero la verdad es que no ocurre, lejos parecen quedar esos grandes momentos de los Modern Warfare que encogían el corazón.

Tampoco podemos decir que la IA ayude, veremos soldados en medio de los escenarios disparándonos sin tratar de ocultarse, o incluso a compañeros disparando literalmente a un enemigo que está delante a menos de un metro y ninguno muere hasta que lleguemos nosotros y disparemos. No hay apenas interacción con el escenario salvo en momentos muy puntuales.

Por desgracia tampoco se muestran bien algunos objetivos, no sabiendo dónde ir o a qué disparar.

CONCLUSIÓN

Una vez más, el multijugador supera con claridad al modo historia, y es una pena porque COD parecía que volvía a sus orígenes y además la IIGM es algo que merece la pena contar bien y daba para unos personajes con carisma a los que coger cariño. Seguramente los fans pasarán del modo historia visto y se centrarán en el online y los zombis, que sí ofrecen sensaciones fuertes.

Como COD no es malo malo, es descafeinado para un solo jugador, y es una pena porque si un día estás sin conexión o, sencillamente, quieres jugar a tu aire, no te vas a emocionar. Por ello se recomienda a fans de la saga y que además jueguen casi siempre online.

Podéis escuchar nuestro análisis en el programa 8×04 a partir del minuto 31:56:

DATOS

Título: Call of Duty: WWII
Desarrolladora: Esledgehammer Games.
Distribuidora: Activision.
Género: bélico.
Plataformas: PS4, Xbox One y PC.
Analizado en PS4.
PEGI: 18+ por violencia y lenguaje soez.
Idioma: totalmente en castellano.
Precio: 54,95 consolas y 39,95 PC.
Web oficial: https://www.callofduty.com/es/wwii