Hace unos días os contamos la presentación de Massïra, juego de Frost Monkey, estudio amparado por PlayStation Talents para apoyar el talento español. Ya os podemos contar lo que nos ha parecido una vez jugado.

Massïra es un juego dramático, pero esto no es necesariamente algo malo. Lo decimos en el sentido de que su temática es muy seria: los refugiados sirios, concretamente el viaje de Numi, una niña obligada a dejar su casa en compañía de su abuela Yara.

Ambas realizarán un largo viaje desde Siria hasta Europa, siempre en circunstancias muy poco agradables y que están basadas en hechos y experiencias reales, con un gran trasfondo social y un cuidado estilo artístico.

El manejo es sencillo: casi siempre controlamos a Numi, que es capaz de andar, correr, saltar, empujar objetos y mover bloques. En muy contadas ocasiones controlamos también a su abuela, aunque sus acciones son mucho más limitadas.

El funcionamiento también es sencillo y se basa en solucionar puzles que nos permitan avanzar, pasar inadvertidos en varias situaciones, encontrar objetos importantes en misiones y una buena dosis de plataformeo. En general la variedad es positiva y ayuda a que las dos horas se hagan entretenidas.

Frost Monkey ha tenido también el detalle de incluir dos caminos distintos según una elección que debemos hacer y que podemos rejugar fácilmente. No cambia nada el desenlace, pero hay que agradecer que no todo sea absolutamente lineal.

Técnicamente se nota que es un desarrollo humilde: las texturas, iluminación y animaciones son muy sencillas, aunque la distancia de dibujado es más que aceptable. Lo que sí destaca es el sonido, con unas composiciones muy inspiradas y algunos efectos sonoros muy trabajados. No hay voces pero los textos están en perfecto castellano, sin faltas de ortografía (o no las hemos podido encontrar), cosa que se agradece mucho.

El problema llega de donde notamos algo que pasa mucho con los títulos salidos de PS Talents. Que nadie nos malinterprete: es una iniciativa genial que apoya a grandes talentos que se merecen una oportunidad para llegar hasta el final y presentar algo tan fantástico como es un videojuego, y eso hay que reconocerlo, agradecerlo y darle cobertura porque no todos lo hacen. Dicho esto, el problema que nos encontramos es que los juegos salen con graves errores (‘bugs’) que pueden llegar a fastidiar la partida y obligarnos a reiniciar un nivel entero. No es un grandísimo problema porque podemos volver rápidamente a donde estábamos, pero es muy incómodo. Pues bien, en Massïra también ocurre, y no es difícil entrar en zonas en las que supuestamente no deberíamos estar y que el juego se bloquee, o que caigamos de repente al vacío, caigamos y caigamos y no muramos. La única forma de continuar es… saliendo al menú principal y volviendo a empezar el nivel. Tampoco es difícil que Numi se quede bloqueada o que las físicas den problemas que nos dejen vendidos.

Y no es error, pero hay ciertos momentos en los que faltan explicaciones y lo que hemos de hacer no queda nada claro. Estaremos yendo de un lado a otro sin saber cómo proceder y seguramente recurramos a YouTube a ver si algún alma caritativa ha logrado superarlo y lo ha publicado.

Lo que tampoco nos ha gustado nada son los tramos en los que debemos manejar a la vez a la niña y a su abuela, sobre todo porque no están pulidos y es frustrante intentar una y otra vez algo tan sencillo como recorrer un túnel corriendo.

También hay un tramo en el que Numi debe hacer uso de un amuleto para ahuyentar a sus enemigos y dicho uso es torpe y lento: entre que presionamos el botón y lo hace, pasa un tiempo precioso en el que los enemigos pueden alcanzarnos. Lo que debería ser una acción rápida y directa se convierte en una necesidad de prever que no está justificada.

CONCLUSIÓN

A pesar de sus fallos técnicos y algunas cosas mejorables de control y de jugabilidad, Massïra logra su objetivo: entretener y concienciar. Evita mensajes políticos (aunque sí se ha colado alguna frase demasiado buenista poco realista) y las críticas van dirigidas a posturas por parte de personajes radicales. Su diseño es excelente y su duración muy ajustada, evitando cansar o resultar repetitivo. El PEGI dice 7 por la falta de contenidos desagradables o lenguaje soez, pero la temática seria y crítica lo hace más recomendable a partir de los 12 años. Un juego valiente que merece ser disfrutado.

DATOS

Desarrolladora: Frost Monkey.
Distribuidora: PlayStation España (código de descarga)
Género: plataformas, puzles.
Plataformas: PS4, PS4 Pro.
Plataforma analizada: PS4.
Idioma: textos en castellano.
PEGI: 7+.
Precio: 12,99 €.
Web oficial: https://store.playstation.com/es-es/product/EP5099-CUSA14220_00-MASSIRA123456789