Llega la que podemos considerar primera gran apuesta de Sony por la PS4: The Order: 1886. Un juego que promete exprimir el hardware de la consola con una historia muy profunda pero también corta.

La desarrolladora Ready At Dawn, conocida por sus juegos de God of War en PSP y Okami en Wii, ha escogido el Londres victoriano, le ha dado una estética steampunk y ha mezclado conceptos como órdenes secretas y hombres lobo.

La historia a priori parece sencilla: La Orden, fundada por El Rey Arturo, lucha contra los hombres lobo y procura mantener la paz en Londres. Sin embargo extraños acontecimientos amenazan con reventar dicha paz. Con esta premisa Ready At Dawn nos mete en la piel de Sir Galahad, un caballero de dicha orden que se ve obligado a replantearse todos sus principios para llegar a la verdad.

Una vez vemos ese comienzo podemos apreciar el increíble trabajo técnico ya que no hay diferencia alguna de calidad entre los vídeos y la acción, logrando así una continuidad perfecta durante todo el juego, solo interrumpida por los saltos de capítulos. Podría parecer que esto no es nada sorprendente ya que es algo que vimos en Metal Gear Solid 4: Guns of the Patriots, pero es que aquí los detalles visuales son de lo mejor visto hasta ahora. Las texturas, la iluminación, las sombras, los reflejos…, todo es asombroso, de principio a fin. Hemos encontrado muy pocos defectos gráficos, y eso que hemos mirado con lupa.

En todo caso hay que apuntar, y es esencial, que a esto han contribuido dos enormes bandas negras arriba y abajo que le dan un aspecto muy cinematográfico pero desde luego suponen una descarga gráfica importante. Habrá quien apunte que sin ellas sería muy difícil lograr una estabilidad y fluidez de imagen tan constante, pero entonces surgen las odiosas comparaciones con casos como el de Uncharted 4 o Metal Gear Solid V: Ground Zeroes en los que sin bandas negras logran ya no 30fps, sino 60fps y perfectamente estables.

Una vez vamos avanzado vemos que esas proezas técnicas no están del todo acompañadas por novedades en la jugabilidad ya que casi todo es ejecutar eventos QuickTime (ya sabéis, una tecla o combinaciones de éstas en el momento preciso para lograr el resultado adecuado), superar tiroteos y resolver facilísimos puzles. Es decir, que no hay innovación ni revolución.

Los tiroteos son muy buenos gracias a un inteligente uso de las coberturas y a un más que aceptable repertorio de armas suministrado por Nikola Tesla, personaje no jugable pero de bastante importancia. Hay algunas que son realmente impresionantes, como la ametralladora de termita o la pistola de electricidad, cuyo uso con la carga al máximo es devastador.

También hay partes de sigilo, pero su funcionamiento es claramente cuestionable. Aun así es divertido, muchas veces ofrece retos intensos y siempre invita a avanzar en la trama para saber qué ocurre, aunque en este sentido da la impresión de que de la mitad hasta el final del guion tuvieron que recortar y mucho y se han dejado la mejor parte de la historia para el segundo juego.

Por desgracia hay que apuntar la casi nula rejugabilidad: no hay extras de ningún tipo ni alicientes para volver a pasárselo. Ni siquiera un multijugador. Lo que se ve es lo que hay: la historia principal, y tampoco es larga.  Además no está muy bien contada y vemos que el juego avanza sin acabar de entender qué estamos haciendo y por qué.

Como os decíamos antes, The Order: 1886 basa su principal atractivo, y con razón, en el aspecto técnico, y si el visual es soberbio el sonoro no se queda atrás, incluyendo un gran doblaje al castellano, marca de la casa que deja en mal lugar a otras compañías que usan malas excusas para no doblar sus juegos. Ya lo dijo Álex de la Iglesia en su momento cuando aplaudió a la industria del doblaje: hay profesionales increíbles y están a disposición de cualquier que quiera doblar sus títulos. Nosotros lo agradecemos por parte de Sony.

En general The Order: 1886 es una grata experiencia técnica que muestra que la PS4 tiene muchísimo que ofrecer cuando se desarrolla con tiempo para ella, pero en este caso se nota una falta de riesgo por la innovación que va demasiado a lo seguro. Es un título muy recomendable a los que busquen un «exprime-consolas» pero que estén dispuestos a renunciar a contenidos extra de cualquier tipo y multijugador.

Podéis escuchar el análisis completo en el programa 5×09 a partir del minuto 23:10: